Abstract (English)

The aim of this paper is to analyze the effects of confinement on care practices and the exercise of violence towards migrant children in the “Dispositivo Transitorio Lobito”, in the city of Iquique, northern Chile. This space -popularly called shelter, refuge or, directly, “Lobito”- was provided by the Chilean government and managed by various institutions, including private and international cooperation agencies. Its creation took place in a context of an intensified influx of Venezuelan migrants and xenophobic and racist violence, especially against those who were living in public spaces. Specifically, I understand that this shelter constitutes a space of production, channeling and exacerbation of the disciplining of care practices exercised between state agents and migrants and among migrants themselves. In this framework, the shelter is not analyzed as an inert and isolated spatiality, but as an instance of crystallization of multiple violences occurred in the migratory transits. The paper aims to discuss the benevolent construction of care and its division from the exercise of violence. Therefore, I analyze a dimension of care -scarcely analyzed in the field of migration- as a locus of the intersection of state, adult-centered and “intrafamilial” violence exercised towards migrant children. The empirical material was produced in the framework of a multi-sited ethnographic research along the South American Western Corridor. Specifically, I take up three fieldwork trips that consisted of an immersion in the “Lobito camp”. The first one took place in May 2022, where, after a previous visit, I settled in the camp for a week. The second and third consisted of daily visits. These took place in December 2022 and in September and November 2023. In that context, in addition to participant observation and informal conversations, I conducted interviews with migrants and shelter workers.

Resumen (Español)

La ponencia tiene por objetivo analizar lo efectos del confinamiento en las prácticas de cuidado y el ejercicio de la violencia hacia infancias migrantes en el “Dispositivo Transitorio Lobito”, en la ciudad de Iquique, norte de Chile. Este espacio -popularmente denominado como albergue, refugio o, directamente, “Lobito”- fue dispuesto por la gobernación chilena y gestionado por diversas instituciones, entre ellas, organismos privados y de la cooperación internacional. Su creación tuvo lugar en un contexto de intensificación de ingresos de migrantes venezolanxs y de violencia xenófoba y racista, especialmente contra aquellxs que se encontraban en situación de calle. Específicamente, entiendo que este albergue constituye un espacio de producción, canalización y exacerbación del disciplinamiento sobre las prácticas de cuidado ejercido entre agentes estatales y migrantes y entre lxs propixs migrantxs. En este marco, el albergue no es analizado como una espacialidad inerte y aislada, sino como una instancia de cristalización de múltiples violencias acontecidas en los tránsitos migratorios. La ponencia pretende discutir la construcción benevolente del cuidado y su escisión del ejercicio de la violencia. Por ello, analizo una dimensión del cuidado -escasamente analizada en el campo de las migraciones- como locus de la intersección de la violencia estatal, adulto-centrista e “intrafamiliar” ejercida hacia las infancias migrante. El material empírico fue producido en el marco de una investigación etnográfica y multi-situada a lo largo del Corredor del Oeste Sudamericano. Puntualmente, retomo tres viajes de trabajo de campo que consistieron en una inmersión en el “campamento Lobito”. El primero tuvo lugar en el mes de mayo del 2022, donde, luego de una visita previa, me establecí en el campamento durante una semana. La segunda y la tercera consistieron en visitas diarias. Estas tuvieron lugar en diciembre del 2022 y en el mes de septiembre y de noviembre del 2023. En aquel contexto, además de observación participante y conversaciones informales, llevé a cabo entrevistas con migrantes y trabajadores del campamento.